En la ciudad de Mendoza, Argentina recibí las primeras claves de la vida y descubrí el encanto de la expresión a través del arte.
Siempre me gustó leer, observar, recrear paisajes internos y externos escribiendo poesías y relatos, expresándome a través del dibujo, la pintura y la escultura. Tuve el apoyo de mis padres desde pequeña y me brindaron la oportunidad de aprender las técnicas básicas del dibujo y la pintura con la pintora Noemí Barchilón.
Inquieta por los temas y las problemáticas sociales, estudié y me gradué en Sociología. Luego fui compaginando la investigación, la enseñanza, el diseño y la concreción de proyectos socioculturales con la búsqueda de remansos para expresarme a través del arte. En Mendoza realicé experiencias creativas y enriquecedoras en talleres de artes plásticas como el de Marita Lavoisier en cerámica y en Viña del Mar, Chile, con pintura en cerámica.
Desde que resido en España me he dedicado más a la escultura en cerámica y he ensayado con otros materiales. Estas actividades junto con la escritura constituyen mi principal centro de interés creativo. En Madrid tuve el privilegio de disfrutar del arte en todas sus formas y conté con valiosas enseñanzas de la ceramista Rosa Martín Burguillo y especialmente de la escultora Ana Ferreira, quienes me ayudaron a descubrir los secretos de la arcilla para moldearla a voluntad y a disfrutar dejándome seducir por sus formas sugerentes y los pigmentos que atrapan el color.
Transformar el mundo simbólico en formas insospechadas, tanto en obras plásticas como literarias, me resulta muy gratificante, especialmente si puedo compartirlas.